La guarda y custodia compartida es la situación legal en virtud de la cual ambos padres, separados o divorciados, ejercen la custodia legal de sus hijos menores de edad en igualdad de condiciones y derechos.
Cuando un matrimonio que está viviendo de alquiler se separa debe comunicar la nueva situación al propietario del inmueble, ya que de lo contrario puede conllevar la resolución o extinción del contrato de arrendamiento.
Según establece la normativa vigente (artículo 21.4 LAU), las pequeñas reparaciones por desgaste de uso ordinario que se deben realizar en la vivienda, cuando la misma se encuentra arrendada, corren a cargo del inquilino. No obstante, es posible pactar lo contrario.
La intervención del abogado en los juicios por delito leve, anteriormente denominadas faltas, no es obligatoria ni tampoco lo es en los recursos de apelación contra dichas sentencias.